Capitulo 20. (Capítulo doble)
Marcos se sentía algo mareado. Había perdido la nocion de donde estaba y Diego estaba abrazandolo con firmeza.
-¿Qué haces boludo?
-Te doy amor.
-¿Qué?
-La cosa es así no te puedo sacar la infección demoníaca, pero si puedo retrasarla dándote amor. No como con Aye, pero amor al fin.
-Aaaah. Ok.
Con un rápido puente de mentes, Marcos se puso al corriente de la vertiginosa realidad.
-¿Maté a Aye y coca?
-Si, pero no pasa nada, no eras vos.
-Pendejo de mierda- se escucho repentinamente una deformada voz femenina- Acaso no podes morirte y dejarte de joder.
-¿Él o yo? Bromeó Diego.
-No importa, esto se termina aca y ahora- ordenó Lucifer, al mismo tiempo que Azazzael, Mammon, Azrael y un ejercito de demonios surgieron espontáneamente.
Diego, Moncho y Marcos, algo nerviosos, se limitaron a mirar al cielo. Una gota fría de sudor bajo por la nuca del ángel…
-¿Y si dejas la guitarrita y nos das una mano varaba?
-Ufa- contestó Dios.
El cielo se ilumino con una radiante luz blanca y una imponente figura llegó del cielo. Dios vestido con sus bermudas, su camisa y su barba partida, se disponía a luchar. Asimismo, apareció Rafael, Miguel y Gabriel. Apareció Jesus, que era negro, alto, pelirrojo, y de ojos fucsias con camisa azul y pollera escosesa. Aparecieron, resucitados Julián, Ayelen, Coca Junto con Dania, Nadia, Ayelen Garcia, Vicky Chila y Mendoza También había otra apersona junto a jesus, vestido con jeans, zapatillas, una remera verde con un número tres, que deduje que era el espíritu santo. Junto con ellos, aparecieron un ejercito de angeles.
-Tiempo muerto- Gritó Dios.
La divinidad formó una ronda compuesta por sus tres arcángeles, las chicas y los elegidos y comenzó a hablarles.
Este es plan, ustedes tres se encargan de los tres demonios, Ustedes, chicos, van a bajar y van a clavar la lanza en la base de la cascada y Jesus, el espíritu santo y yo…
Dio no pudo terminar de explicar su idea, ya que Dania le encestó una patada en los bajos, la cual lo dejó doblado, chillnado de dolor al grito de “Uuuuuuhh” de toda la ronda y de un grito de Lucifer de fondo “Eso tuvo que doler”.
Sin dar tiempo a que Dios se incorpore, Azrael solta sobre el grupo y es intersectado por Gabriel, quien parecía muy animado, portando sus Sais ( como los de Raphel , la tortuga ninja ) repele al demonio y comienza una encarnizada batalla cuerpo mientras que las ordas del cielo y el infierno se chocaban entre si , los lugartenientes comenzaron a bataller con su máximo poder.
Rafael le hizo frente a Mammon , este riéndose de la poca estatura de su adversario no vio cuando el pequeño arcángel lo derribo con sus nunchakus esto hizo que el demonio se enojara rápidamente y sacando su katana trato de derribarlo , pero el angel se defendió enredando su arma contra la espada del demonio y volviéndolo a derribar.
- Estas lento – se burlo Rafael ante el gran Mammon que no podía levantarse.
Los arcángeles parecían dominar todas las batallas pero Araziel combatia aventajando a Miguel en todos sus movimientos, este daba estocazo tras otro, el demonio las esquibava con facilidad y no se dejaba entre ver cansancio alguno.
- Yo pensé que el Arcangel Miguel iba a dar mejor batalla – confeso Araziel con su tono impacible pero amenazador.
- Yo … te… voy … a matar … puto- jadeo Miguel lo máximo que pudo.
- Lo dudo.
Acto seguido Araziel saco una flecha de su arco y la disparo, Miguel casi logra esquivarla , pero lo dejo un surco de sangre en la mejilla derecha.
La atracción circundaba en la batalla tácita que Lucifer, mantenía vorazmente con Dios, Jesus y el espíritu santo. Los cuatro estaban sentados en el césped, compartiendo un cigarrillo de marihuana, un vaso de Coca Cola, y discutiendo el motivo por el cual, dios combina una bermuda celeste y una camisa rosa. Al tiempo que el barbudo, retrucaba la desleal actitud de su antípoda al cuestionar el motivo por el cual mantener a Humberto Grondona padre como presidente de La Asociación de Futbol Argentino.
Sobre el calor de la batalla, los chicos corrian hacia la Garganta del Diablo , esperando poder clavar rápidamente la lanza ne lgarganta del diablo. Lucifer, al ver que nadie detenía la carrera de la pequeña tropa liderada por Diego, pasó el porro a Jesus y se interpuso entre la base de la cascada y los jóvenes.
Con un rápido movimiento, Lucifer se multiplicó en 11 versiones de si mismo, y entabló batalla con todos. Más rápido que lo que Maradona podía consumir 4 líneas de coca, Lucifer se despachó a las vickys, a Aye garcia, los perros y Nadia.
Con cada muerte, lucifer volvió a juntarse para quedar nuevamente como una sola persona.
-Ahora empieza la parte divertida de matarlos a todos – vociferó furioso Satanás
-¡Ustedes pueden! – Gritó Dios desde la cima de la cascada. –Con una mano sola no podes pelear Marquitos. Dicho esto, la mano amputada de Marcos se regeneró.
Marcos trasformó en katanas ambas de sus armas y junto ocn Diego y Ayelen, embistieron a su adversario, amputándole todos sus miembros. Acto seguido, este se desvaneció en el aire. Todos formaron un circulo defendiéndose de cualquier ataque. Repentinamente Julián comenzó a hacer ruidos guturales y comenzó a contorsionarse, como si estuviera poseído.
-El bastardo se metió dentro de él- grito Ayelen – voy a entrar.
En ese momento Ayelen salto como si se yambullera en la boca de julian. Este dejó de convulsionar y se desmayó. Dania corrió a su auxilio y lo tomó por la espalda y lo recostó sobre ella.
- Vayan de una vez y terminen con esto – les gritó Dania.
Diego y Marcos aprovecharon la oportunidad y corrieron dentro de la base de la cascada para encontrarse en una cueva en cuyo centro había un pequeño monilito sobre un altar. En él, podía verse la estrella pentagonal brillando en un dorado verdoso.
Dania arrastró a Julián dentro de la cueva y ambos se apoyaron en una pared uno sobre el otro.
Diego tomó la lanza y amagó a clavarla en el altar cuando Araziel lo golpeó, haciéndole tirar la lanza de Longinus.
- Pobre Miguel – esbozó el demonio.
- Maldito, lo mataste – Gritó fúrico Marcos.
- No es una novela mejicana, todos van a morir por mi mano
Marcos y Araziel se trenzaron a mano limpia golpe por golpa mientras Diego intentaba reponerse, lastimado por el golpe comenzó a arrastrarse hacie el altar, cuendo repentinamente, de la espalda de Julián, salió un puño que atravesó a Dania de lado a lado. El grito de la muchacha desvió la atención de Diego, el cual corrió como pudo a su auxilio. Sin nada por hacer, Diego intentó cortar el brazo, solo para descubrir que otro brazo salio de la herida, junto con el resto del cuerpo de Lucifer. Sosteniendo la cabeza cercenada de Lacabel y su Kwandao en la otra mano. Esperando el golpe final Diego rodó hacia su izquierda pero no pudoe escapar de el embiste de Belcebú, el cual no pudo clavar la hoja en la carne de diego, `pues esta se dobló al simple contacto. Diego se elevó en el aire y aterrizo junto a Dios, que había entrado en la cueva.
Bueno,ahora me toca a mi- Dijo muy efusivamente Jehová
Dios miró a Araziel y le guiño el ojo. Y todo lo que el demonio llegó a decir fue “ohoh” antes de reventar como sapo en ruta 3. Satanas, absorto, intento escapar. Pero se vio inmovilizado por Dios. Que recitaba un canto en un idioma que no pude entender. El demonio máximo comenzaba a fracturar internamente sus coyunturas tomándo la forma de un hexaedro para quedar frente a frente.
Esto se terminó Lucy. Segui participand…
Dios no pudo terminar la frase, pues vio atravesado su pecho por Longinus la cual empezó a oscurecerse y la sangre en ella se tornó azul brillante la cual, empezó a avanzar sobre el cuerpo de Dios recubriéndolo y ahorango su grito en un suspiro final.
Diego, absorto de ver muerto a Dios, levantó su mirada, para sorprenderse viendo a Marcos, completamente rubio, con ojos celestes, y una malévola sonrisa en los labios.
-¿qué hiciste pelotudo?- grito desesperado Diego.
-Esto hice- dijo secamente Marcos, que, de un solo movimiento, cortó la nuca de diego con la Lanza.
Diego empezó a perder el conocimiento, y lo último que escuchó fue una desgarradora risa de placer que salían de los labios de Marcos. Luego, todo se sumergió en la oscuridad.
EPILOGO
Me desperté agitado, no quería abrir mis ojos, por temor a lo que pudiera ver. Sentía un fuerte dolor en la nuca, donde el enfermo de Marcos me cortó con Longinus. Me incorporé lento, lso ojos bien cerrados, el dolor de la nuca era punzante. Buscqué con las manos algo que me resulte familiar y para mis sorpresa, sentí mis cuadernos universitarios. Abrí un ojo, luego el otro, y me encontré en mi clase de Teoría Social, miré a mi alrededor, todos estaban en sus lugares, la mitad de la clase estaba dormida y la otra mitad no prestaba atención. Marcos estaba garabateando cosas en una papel y tenia una extraña sonrisa en los labios. Fúrico me di media vuelta y encesté un golpe en su cara. Atónito, me pregunto que carajo me pasa. Como si me tomara por tonto le explico que es por matar a Dios, por matarme a mi y por todos los chicos.
-¿Fumaste Diega?
-¿Qué decis? Vos me mataste, mataste a Dios.
-¿Qué? ¿Te sentís bien?
-¿Qué día es hoy?
- Lunes, 16 de mayo del 2010.
-Pero… vos… y Aye… Y Julián… Las chicas y el apocalipsis… No entiendo nada.
-Te quedaste dormido, lo soñaste.
-Puede ser, que se yo… Era tan real…
-Sino no seria sueños…
La clase termino sin pena ni gloria, todos se fueron por su lado. Menos Marcos, que caminaba a la par mia y discuiamos sobre pavadas sin importancia. En cierto momento comenzamos a hablar sobre mi sueño, el apocalispsis, sobre cómo sería Dios y un largo etcétera…
¿Crees que en el Apocalipsis ganen los buenos Marquitos?- Pregunte.
Que se yo Diega, siempre hay un puto que se da vuelta al final… hablando de eso, si la salvacion la tuvieras delante. ¿Crees que la reconocerías…?
Admito que dudé un segundo… esa frase la había escuchado antes, no tenía muy en claro donde, ni cuando. Pero la sentía fresca.
Creo que si Marqui, la verdad, creo que si.
Me sonrió y siguió caminando, y de reojo, pude ver que escribía en su celular, algo que no entendí; decía: “patealo, que se avivó”.