Yo creo que entre alguno de los talentos que me han tocado en suerte está el de ser bastante "despierto" a la hora de darse cuenta de las cosas en general ¿no?. Es decir, cuando hay algo que"huele raro", que "no cierra", lo percato y lo exhibo.
Pero en esta ocasión voy a contarles un hecho donde me vi superado amplia-mente por un ser ¿Superior?, en fín. Me vi superado por mi padre, que me dejó en ridículo en frente de mi familia, pero con una exquisitez digna de ser aplaudido de pie.
Antes, voy a contarles un poco como es mi papá. Él es un flaco sencillo, labura en Sony Music Entretainment como vendedor, no le gusta tener problemas, a tal punto que los evade no expresando opinión en discusiones. Mi viejo sufre de lo que yo llamo el "síndrome de Flanders", es muy difícil ver enojado a mi progenitor, pero cuando se enoja arde Troya. Vive diciendo boludeces incoherentes e incohesionadas. inventa palabras absurdas sin significado. Un ejemplo podría ser la vez que la pregunte:
_Pa, ¿Qué vamos a comer?
_Sambroclas.
¿Podría alguien explicarme que mierda son "sambroclas"?. ¿Entienden a lo que apunto?
El asunto viene así, salimos a comer a una pizzeria libre. Para los que no están adentrados en el termino, es un lugar donde las meseras desfilan provocantes con las bandejas con pizzas divididas en gustos y uno se sirve a gusto hasta reventar.
Los presentes eran mi papá, mi mamá, mi hermano menor y yo. Esto sucedió a principios de 2002, y hacia poco tiempo que Racing había salido campeón nacional, por lo que yo estaba muy contento y muy emocional, además tenia 12 años (nótese la apertura del paraguas), luego de una serie de gustosas porciones de variados gustos de pizzas, se me fue entregada una única porción del gusto "aceitunas negras". Para que se den una idea era una masa con queso y montones de rodajas de aceitunas negras invitándome a devorarlas con fervor y placer. Mi padre, amante como yo de dichos frutos me pidió que le convidara.
Como yo quiero a mi padre, pese a ser una persona muy poco expresiva de sus emociones, lo cuido. Mi papá es hipertenso y no puede comer aceitunas debido a su nivel de sodio, por lo que el médico se las prohibió, además, ¡Eran aceitunas negras por el amor de Dios, ¿Alguien amoroso en mi misma posición no hubiera actuado como yo?. La situación se desarrolló así:
_Marquitos, ¿Me das algunas "pirindopas" (señalaba a las aceitunas negras)?
_No pa, vos no podes comer de esto. El medico no te deja.
_Dale, dame algunas.
Mi vieja me defiende
_Jose, tenes la presión alta y ya comiste de cebolla y de aceitunas verdes.
_Pero me podría dar algunas.
_Ni en pedo pa.
Pone cara de resignado y apoya los codos en la mesa mirando al vacío, como pensativo y expectante de otra porción. Después se acomoda y pasan 30 segundos más.
_Che, ese no es Mostaza Merlo (DT del Racing campeón del 2001)
(Volteo) _¿¡¿En serio?!?, no jodas, (Volteo) _¿Dónde?
_Ahí mirá, está ahí.
(Volteo) _No lo veo, ¿Por dónde? ¿Por enfrente?. (Volteo)
Mi vieja estaba roja, con la boca cerrada porque tenia en ella, pero no podia soportar la risa. Mi hermano estaba en la suya no entendía nada, y mi viejo tenia una pícara sonrisa Houseana en los labios. Me miró y vio mi plato. Yo miré mi plato y me percaté que 3/4 partes de las aceitunas negras habían desaparecido, mi vieja empezó a reír a carcajadas y un pedazo de pizza salio volando por los aires cual "hombre bala".
Si, ya deben haber deducido que sucedió, Merlo no estaba allí, y si, mi viejo se me comió casi todas las aceitunas negras del plato bajo mis propias narices. Pero mi enojo con el estaba siendo ampliamente superado por mi admiración. La dicotomia era desigual, que frío fue para ejecutar su plan, que excelente manera de pensar y con guante blanco cometió el mejor crimen, me quito comida de mi propia mano y la engullo orgulloso. Su sutileza fué tan suave que no la pude percibir y entre como un caballo en su establo, me puso la correa y me llevó a pasear.
Yo, me quito el sombrero ante él. Mi viejo.