Domador de Chevys: Chapter ∞ - Serás lo que debas ser...

Marcos estaba endemoniado, no le hablaba a nadie desde la muerte de su padre, solo Furcia era quien podía arrancarle algunas pocas palabras. Norita recibió una paloma mensajera y partió pocos días después tuvo que marcharse. El Toro la despidió y ella solo le dedicó dos palabras "Cuidalo bien". El Toro volvió a su rutina autocomplaciente y Oveja continuaba inmerso en su mundo ajedrecista.

Cierto día, Oveja salió de su habitación para aprovisionarse y se topó con el muchacho, tenía la mirada perdida y no emitió palabra.

-Te ves para el carajo pequeño- bromeó. Pero no obtuvo respuesta alguna.

Oveja no le dió importancia y continuó con sus asuntos, luego de varias idas y venidas, se percató que Marcos continuaba parado en la puerta de su habitación, justo en el mismo lugar donde se tropezaron momentos antes. Él lo empujó escaleras abajo y el muchacho pareció reaccionar.

-¿Me tropecé?
-Efectivamente.

Marcos recorrió el lugar con la vista. La habitación era amplia, pero estaba abarrotada de libro. Una cama y una mesa de luz era lo único que no tenia páginas en su interior, sobre la mesa de luz había una lampara, y al pasear por el lugar notó que el escritorio, la mesa que sostenía su tablero de ajedrez y el modular que había a un lado estaba hecho de libros.

-No salís muy seguido ¿verdad?
-No es necesario, tengo todo lo que necesito.
-¿Con quien jugás?
-Acabo de vencer nuevamente a Mijaíl Botvínnik
-¿Jugas contra este libro?- Preguntó ingenuamente.
-Hay alguna otra forma de verlo.

Oveja tomo las piezas y comenzó a acomodarlas en la posición de partida. Las blancas apuntaban a Marcos.

-Sentate- Ordenó Oveja, el muchacho tomo asiento mientras su interlocutor acomodaba las piezas -¿Qué te sucede?
-Siento una extraña sensación, pues me duele más la muerte de Dodge como amigo que como padre.
-Era un gran amigo, la idea de tenerlo cuidando tu espalda era tranquilizadora- aseguró Oveja -Empezá vos.

Marcos movió el peón del rey dos espacios adelante (P4R).

-Siento que quiero hacer algo, pero no se que es.

Oveja hizo lo mismo (P4R).

-¿Venganza?

Marcos movió el alfil del rey tres espacios hacia adelante en diagonal izquierda(A4A).

-Me gustaría, pero no creo que pueda contra esos domadores.

Oveja movió el caballo de la reina hacia adelante tres espacios y una a la derecha (C3AD).

-La única persona que puede matar a un domador sin ser asesinado en el intento es otro domador.

Marcos movió la reina cuatro espacios hacia adelante en diagonal derecha(D5T). Oveja respondió avanzando su otro caballo hacia adelante tres espacios y uno a la izquierda (C3A).

-Creo que ya se lo que tengo que hacer, gracias Oveja (Marcos movió la reina dos espacios adelante en diagonal izquierda y comió un peón de Oveja) (DxPD), Jaque mate. Y se fue corriendo de la habitación escaleras arriba. Ante la vista de su contrincante.

-Serás lo que debas ser... Oveja se interrumpió a si mismo y miró el tablero, miró al muchacho alejándose y miró nuevamente su tablero, no se había percatado que había perdido la partida. Mientras Marcos cerraba la puerta, se escuchaban los gritos y maldiciones del perdedor mientras tiraba el tablero y destruia la mesa hecha de libros.
Marcos cruzó los pasillos y encontró al Toro tomando algo en el bar.

-Toro, quiero ser domador...